«Necesitamos más tecnología, tenemos que ser más competitivos para exportar»

Lo dijo el titular de Juber SA, empresa localizada en Darregueira y cuya actividad principal es la fabricación de maquinarias agrícolas, al incorporar tecnología de punta en sus procesos de fabricación.

La Facultad brindó asistencia técnica a Juber para concretar la modernización. El proyecto se centró en la incorporación de un pantógrafo computarizado por oxicorte y plasma, que permitirá a la empresa realizar piezas con mayor calidad. Además podrá disminuir la dependencia de terceros en la provisión de algunos elementos de su actual cartera de productos, y a futuro prestar servicios en la región, con la capacidad de equipo disponible.
Las actividades del proyecto incluyeron la compra del equipamiento, su instalación y capacitación del personal para su operación. Fue financiado por medio del programa de Modernización Tecnológica del FONTAR (Fondo Tecnológico Argentino).

Durante la presentación del nuevo equipamiento, Jorge Berruete, titular de Juber, expresó que “la participación de la Facultad fue la clave fundamental para lograr concretar el proyecto y tener lo que necesitábamos. Quiero destacar la buena predisposición de siempre, la rapidez y la agilidad para los trámites. Todo fue hecho con mucho profesionalismo y apoyo, con lo cual estamos sumamente conformes”.

La Facultad en la región

Profundizando en el rol que ha cumplido la Facultad en este proyecto, el empresario comentó: “Yo veo muy bien por parte de la Universidad que ha salido a la región a ver los problemas comunes de todo el sector metalmecánico, eso creo que tiene muchísimo valor, más allá de que los resultados se den o no. Creo que el hecho de estar metidos en todo lo que es la problemática de la región,  para nosotros que estamos  tan lejos de los centros de aprovisionamiento de la industria pesada como son por ejemplo Santa Fe o Buenos Aires, es destacable. Y considero importantísimo que la Universidad desarrolle toda la parte técnica de formulación del proyecto, que nosotros no podemos hacer en nuestras empresas, por lo que la recomendaría plenamente. Todos los que estamos en esta región necesitamos más tecnología, tenemos que ser más competitivos para exportar. Pero si no tenemos una Universidad como ésta con técnicos que nos puedan apoyar, nosotros solos no podríamos llegar a mucho.”

Cómo funciona el pantógrafo

Sobre los aspectos técnicos de la máquina incorporada, Berruete detalló: “El equipo es un corte de plasma de alta definición. Esto significa que corta con aire, con oxigeno y con nitrógeno. Tiene tolerancia mínima de una centésima, o décima, según se regula la precisión. El equipo es norteamericano, de tipo automático. El pórtico donde lleva la trocha, que es la que corta, es de origen nacional, y la mesa también es de origen nacional. Esta máquina nos permite cortar todo tipo de material con la más alta precisión, desde acero hasta platino, no hay ningún límite. El ahorro de chapa que vamos a tener es importantísimo, y también el ahorro de tiempo de producción: ya notamos que para una pieza que antes tardábamos una hora y media en hacer, ahora la misma tarea nos lleva 47 segundos. La capacidad es muy grande; el equipo tiene un ancho de corte de 2,5 metros a 6,5 metros, con lo cual podemos poner 3 chapas de distinto espesor, y puede ir cortando simultáneamente, mientras se van sacando las piezas del primer corte y rápidamente se van colocando otras. Si bien conocíamos el corte por plasma con aire, que es muy bueno, éste que es de alta definición, es algo impresionante y es lo más cercano a un corte perfecto.”

Jorge Berruete asevera: “Los que estamos con una pyme siempre pensamos invertir en más fierros, en más galpones, siempre en más…” Cuando un amigo le preguntó: “¿Cómo hiciste para comprar algo tan caro?”, Berruete ironizó: “Mirá, pasé por una juguetería, me gustó y lo compré.”