Las tesis de las ingenierías de base
Durante la realización en nuestra Facultad del III CAEDI, tuvimos la oportunidad de departir largamente con el Ing. Marcelo A. Sobrevila , autor del libro “La formación del ingeniero profesional para el tiempo actual. Tesis de las ingenierías de base”, editado recientemente por la Academia Nacional de Educación, del cual brindamos un apretado análisis a continuación.
En estos tiempos de grandes crisis en todos los aspectos de la vida diaria de las personas, en los cuales parece no tener fin la aparición de nuevas y variadas problemáticas que coadyuvan al malestar social general, pero en los que no se avizoran grandes pensadores que aporten ideas creativas para dar solución a las mismas, el Ing. Sobrevila sigue sorprendiéndonos con el aporte de nuevos conceptos que constituyen líneas de pensamiento claves en el campo de la enseñanza de la Ingeniería.
El libro comienza con una “advertencia al lector”, poniendo de manifiesto que el trabajo -aunque actualizado- conserva los lineamientos del que mereciera el primer premio y diploma de honor en el 4° Congreso de Políticas de Ingeniería del CAI en 1998.
Ya antes de entrar en la lectura del texto, el Prólogo del Presidente de la Academia, Ing. Arturo Bignoli, nos sorprende gratamente al sostener que “Tradicionalmente se enseña mal la ingeniería en nuestro país, con métodos que tal vez podrían haber sido aceptados el siglo pasado cuando la meta era formar ingenieros científicos para actuar profesionalmente. Hoy la situación es diferente y ya está claro que puede haber ingenieros científicos e ingenieros profesionales, con objetivos bien diferentes”. A la formación de estos últimos se aboca la obra.
En el Prefacio, el autor se refiere a sí mismo confesando que “soy un vicioso de la educación, y un sobreviviente del sistema educativo”, inaugurando un sutil estilo irónico que acompañará con su postura crítica de la realidad y que no abandonará hasta el final de la obra.
El libro, de 126 páginas, comprende un Capítulo Introductorio y cinco Capítulos que abarcan los siguientes temas: 1) La cibercultura y la globalización, 2) La ingeniería en la cultura contemporánea, 3) La identidad de la ingeniería actual, 4) El ejercicio profesional de la ingeniería y 5) Las ingenierías de base. Nótese que la sola lectura de estos títulos permite al lector vislumbrar que el autor abonará su tesis con un fundamentado análisis de las cuestiones adyacentes.
Resulta imposible plasmar en tan poco espacio la totalidad de los conceptos novedosos que aporta el Ing. Sobrevila en su obra, pero no podemos dejar de mencionar algunos tan reveladores como polémicos. Por ejemplo, luego de un “ejercicio imaginario” que resulta de suponer una huelga de todos los ingenieros profesionales del mundo durante 72 hs, el autor llega a la conclusión de que “Sin ingeniería –en términos generales y para todas las especialidades y orientaciones- las sociedades modernas ya no pueden funcionar”. ¡Vaya valorización del trabajo del ingeniero, tan poco tenido en cuenta por la conciencia general! Y sostiene más adelante: “Podemos afirmar que, aunque en forma virtual o entre bambalinas, la ingeniería ha pasado al poder y los ingenieros todavía no lo han percibido. Es por eso que la formación de los ingenieros es asunto importante, dado que de su actitud ética han de depender muchas cosas del futuro de la humanidad”.
Tan superlativa es la importancia que el autor le asigna a estas reflexiones, que se atreve a afirmar: “Los tiempos que corren están dando lugar al nacimiento de lo que muy bien podemos llamar, la Edad de la Ingeniería”.
Basándose en innumerables criterios que no suponen desperdicio, presenta su tesis acerca de la necesidad de inculcar a los futuros ingenieros –desde el principio- “una actitud profesional técnica, de base amplia, con sentido gerencial, ético y social, en reemplazo de la anticuada actitud científica abstracta, como se ha venido haciendo desde hace un siglo a esta parte”.
Propone separar claramente al ingeniero profesional del ingeniero científico, “cancelando de una vez y por todas el interminable rosario de especialidades y orientaciones actuales” (más de 70 en el país). Para ello, debería darse al estudiante la opción para que seleccione entre unas pocas ingenierías de base, las suficientes como para que el graduado pueda canalizar sus vocaciones y ubicarse dentro de un espectro amplio de empleos, egresando con el título único de INGENIERO. La preocupación del autor es que debe dotarse al ingeniero profesional, desde el principio, de una personalidad precisamente profesional para el ejercicio de la ingeniería real y concreta, tal cual es hoy y como, ya se vislumbra, será en el futuro próximo. Más tarde, pueda tal vez transformarse en un ingeniero científico mediante cursos de especialización, maestrías o doctorados, a través de lo que el autor denomina “ingenierías periféricas”, las que no son más que orientaciones o especialidades surgidas de las respectivas ingenierías de base.
En su ensayo, el Ing. Sobrevila propone cuatro ingenierías de base, dejando abierta la posibilidad de incluir una quinta en el futuro cercano. Estas son: Infraestructura, Producción, Energía y Comunicaciones, quedando en estudio la Ingeniería Biológica.
Siempre siguiendo al autor, las ventajas que traería aparejadas la implementación de su ponencia serían múltiples, y comprenderían desde la disminución del tiempo de cursado, eliminación de asignaturas, impulso de los posgrados, racionalización de recursos, flexibilidad de las ofertas educativas, etc.
Innumerables ideas expuestas por el autor han quedado irremediablemente afuera de este breve resumen. Como síntesis, podemos decir que puede coincidirse en la totalidad de la tesis o sólo en parte. Pero lo que sin lugar a ninguna duda puede dejar de hacerse tanto en el ámbito universitario como en el de las empresas demandantes de ingenieros, es tomar la obra del Ing. Sobrevila como libro de cabecera y fuente de inspiración de nuevas ideas y de líneas de discusión para realizar los cambios que la sociedad nos demanda en la enseñanza de las ingenierías.
Dr. Ing. Liberto Ercoli
El Ing. Marcelo Sobrevila es Ingeniero Mecánico y Electricista de la UN La Plata. Ex Techint,.Ex Rector UTN. Ex Decano Fac. Ing. Universidad de Belgrano. Ex Prof. Tit. UTN, UN La Plata y UBA. Autor de numerosos libros de elctromecánica y artículos de formación de ingenieros. Miembro de la Academia Nacional de Educación. Consultor en Evaluación y Acreditación. Evaluador de proyectos de posgrado de ingeniería.