Hacia una nueva facultad

Nuestra casa se encuentra a punto de comenzar una importante etapa de refuncionalización de sus edificios, en busca de un mejor aprovechamiento de las instalaciones.


La casona al ser ahogada por los cuerpos verticales, perdió sus fachadas exteriores.

El 10 de febrero se celebró un acto en el Salón Blanco de la Casa de Gobierno (Buenos Aires) en el que participaron el Rector de la UTN Héctor Brotto, Decanos y otras autoridades de la Universidad Tecnológica y de otras Universidades Nacionales. Por nuestra Facultad concurrieron el Decano y el Secretario Administrativo.

Con la presencia del Presidente de la Nación Néstor Kirchner, el Ministro de Educación, Ciencia y Tecnología Daniel Filmus y el Ministro de Planificación Federal Julio de Vido, se firmó el convenio mediante el cual las Universidades Nacionales reciben dinero del Plan de Infraestructura Universitaria.

En esta oportunidad, la UTN recibió $7,3 millones, de los cuales $216.000 corresponden a la Facultad Bahía Blanca para comenzar obras varias de mantenimiento edilicio. Dentro de 30 días se firmará un nuevo tramo por el cual nuestra Facultad recibirá $500.000 para el inicio del plan de refuncionalización edilicia impulsado por la gestión con el aporte profesional del Departamento de Ingeniería Civil (DIC) y aprobado por el Consejo Académico.

Esta nota contiene las reflexiones surgidas de los documentos elaborados por el Director del DIC, Ing. Oscar F. Marcolini y el docente Arq. Luis E. Caporossi.

¿En qué consiste la remodelación?

El Plan Director elaborado por el DIC se plantea los siguientes propósitos de la reforma: 1) Solucionar los problemas de funcionamiento y seguridad que presenta el edificio; 2) Modificar la situación de incomunicación y aislamiento entre las principales áreas funcionales del edificio y 3) Destrabar el necesario crecimiento de áreas específicas actualmente congeladas.

Estas transformaciones se realizan en el marco de un replanteo y mejoramiento sustancial de las condiciones de habitabilidad de todos sus locales y de la propuesta de jerarquización de sus servicios a la comunidad acorde con la centralidad de su ubicación.

Los propósitos mencionados se corresponden puntualmente con el diagnóstico realizado oportunamente por el DIC y por la evaluación de la CONEAU relativa a planes de mejoras.

En síntesis, la propuesta es que el edificio alcance su original y potencial valor de sede de la UTN, de alcance regional con servicios de extensión de alta calidad, propósito actualmente dificultado por la inadecuación de sus instalaciones.

Conclusiones del diagnóstico

Si bien los crecimientos sucesivos que experimentó el edificio han resuelto las demandas específicas de espacio (ver «Sobre el desarrollo histórico del edificio», en esta misma página), no todos han contribuido a un mejor funcionamiento global, al contrario, han agudizado algunas situaciones críticas de circulación, ausencias de esperas y seguridad. La relación integral entre las dos torres y la casa nunca fue resuelta, ni funcional, ni estética, ni constructivamente.

A futuro, y dada la tasa de incremento de estudiantes, será necesario descentralizar el funcionamiento de la institución, situación que resulta normal en cualquier desarrollo sostenido. En ese momento el edificio actuará como una nave madre con anexos que funcionan en red. Este proceso a futuro debería ser visto como una doble oportunidad de optimización tanto del edificio madre como de sus posibles áreas descentralizadas, no como el escape de un complejo presuntamente obsoleto.

En cuanto a las áreas comunes, se puede enumerar dentro de éstas a la Biblioteca, el Salón de Actos, la Fotocopiadora, el Bar, la Sala de profesores, el Centro de estudiantes, oficinas de Informes, de Alumnos , etc. Pero la primera y principal área común masiva de una institución no es la biblioteca o el bar o cualquier otra función puntual sino su propio espacio circulatorio . En una ciudad, el espacio circulatorio es sencillamente el espacio urbano, esto es área de socialización, encuentro, intercambio y representación por antonomasia.

La importancia de circular

En un edificio el sistema circulatorio no sólo debe canalizar eficientemente los flujos de entrada, salida y movimiento interno de personas y cosas sino posibilitar además:

  • Que los halls de acceso a ascensores y escaleras sean estancos y no estén afectados por circulaciones ajenas al mismo.
  • Que las dimensiones de ancho mínimo y superficie sean las adecuadas a la cantidad de personas que las usan y que esto mismo ocurra con las escaleras. Esto vale tanto para los pasillos de las aulas como para el hall central. Deben evitarse cuellos de botella y estrangulamientos.
  • Que el tipo de ascensor sea adecuado al problema.
  • Que las circulaciones permitan detenciones, esperas e intercambios allí donde sea necesario, sin afectar los flujos de movimiento, permitiendo que encuentros fortuitos y diálogos informales se puedan desarrollar en forma natural ya que se trata de una universidad. Es llamativa la actual ausencia, total y absoluta, de lugares de espera convenientes tanto en áreas de gobierno, como áreas administrativas y halls generales. Esta carencia explica la actual característica del edificio de expulsar al usuario una vez terminada su puntual tarea especifica por una razón muy sencilla: no hay dónde estar ni qué hacer.
  • Que sea posible visualizar las distintas localizaciones funcionales, así como percibir la organización del edificio.
  • Que goce de buenas condiciones de iluminación y ventilación.
  • Que se cumplimenten los requisitos básicos de seguridad y condiciones de los medios de salida, desde el dimensionado hasta la forma de apertura.
  • Que se evite la formación de corredores en cul de sac, sin escape final.

Le Corbusier observó que lo más importante de un Congreso no sucede en la sala, sino en los pasillos que la rodean: de hecho compartir la circulación permite y facilita encuentros informales entre los distintos miembros de una comunidad, lo que favorece su funcionamiento, integración e identidad. En nuestro caso, el problema reside en que se trata de un edificio en vertical, en el que dos torres separadas se vinculan con una casa con tres niveles.

Cómo cambiará el funcionamiento

Dado el movimiento marcadamente vertical y mecánico del edificio se propone relocalizar en los niveles de basamento todas las funciones públicas y masivas, conformando un conjunto de funciones comunes altamente integradas.

Se propone, además, vincular horizontalmente los núcleos verticales de las torres en los niveles 0.00, +3, +6 y +9 metros, a la par que se refuerza la circulación en los mismos, agregando dos escaleras que facilitan las vinculación peatonal. Esto permite tanto descomprimir el uso de los ascensores como posibilitar las conexiones directas entre torres, ampliando las condiciones de seguridad.

A nivel +12m se emplazará una cubierta liviana que cubre 600 m2 sostenida por cinco vigas metálicas de 20 metros de luz. La cubierta propiamente dicha consiste en una combinación de chapas prepintadas y chapas translúcidas de policarbonato.

Obras en la planta baja

Se plantea recuperar la totalidad de la planta para actividades públicas masivas. La propuesta es crear un Centro de Conferencias con dos Salas Multipropósitos integradas con equipamiento multimedia y teleconferencias. Estas salas de conformación variable tienen una capacidad para 400 personas sentadas. Están pensadas para adaptarse a funcionamientos de tipo taller, cursos de capacitación, congresos, actividades culturales diversas, etc.

Una amplia superficie de hall está planteada y equipada para poder organizar en ella exposiciones de todo tipo, tanto culturales como educativas. Esta superficie, iluminada cenitalmente por la cubierta metálica, contará con servicio de cafetería, fotocopiado y publicaciones, además de informes y sanitarios. Toda esta área dispone de un acceso independiente desde la calle permitiendo un uso flexible para la comunidad.

Por su parte el sector académico esta utilizado en este nivel por las áreas que tienen usos masivos de usuarios como las oficinas de Alumnos , Bedelía, Asuntos Estudiantiles y Extensión Universitaria.

Primeras tareas

En primer lugar el Plan propone eliminar de planta baja los actuales emplazamientos de depósito de materiales y talleres de mantenimiento, usos que no condicen con el valor y jerarquía potencial de la planta. Esto permitiría sumar esas superficies a la de patios todavía existentes que no cumplen ningún uso efectivo.

A continuación, se actuaría sobre el nivel inferior de la casa proponiendo que la misma funcione a nivel 0,00. Esto revierte el funcionamiento en planta baja de la casa hacia el anillo de circulación exterior permitiendo aumentar el perímetro de mostradores de atención de publico y nivelando toda la planta en único solado.

La idea es que a la planta baja de la casa, una vez a nivel 0,00, se acceda desde el hall circular eliminado el actual hall interior, incorporándolo como superficie útil. Al actuar sobre la planta baja local por local se puede ir incorporando una superficie útil adicional de entrepiso a tres metros de aproximadamente 300 m 2 .

Sobre el desarrollo histórico del edificio

Se pueden marcar cuatro etapas claves

Período 1954 -1963

La sede funcionó en Zelarrayán y Rodríguez, edificio propiedad de la UNS, siendo decanos los ingenieros Azolina y Vallés con un máximo de 50 alumnos.

Período 1963-1967

Siendo Decano el Ing. Vicente Egidi, que a partir de ese momento va a continuar en el cargo en forma ininterrumpida hasta 2001, se adquiere para sede propia de la UTN la casa Du Mortier, obra neoclásica proyectada por el importante arquitecto polaco Semanlecoff en 1906. Ubicada en 11 de abril 461 con una superficie cubierta útil de 450m 2 sobre una parcela de 30 x 49 m.

Para el funcionamiento se usan aulas de la vecina Escuela de Comercio.

Período 1967-1974

El Ing. Egidi, como Rector Sustituto, comienza y habilita la Torre de Laboratorio de cinco pisos, de 2455 m 2 de superficie cubierta construida en el fondo del lote. El proyecto es del arquitecto Pascualetti, profesor de la casa, y el cálculo, del Ingeniero Eloy Varela.

En ese período no existía una conexión cubierta entre la sede inicial y la torre de laboratorios, sino que se trataba de dos edificios aislados en la parcela. La fachada noroeste de la Torre de Laboratorios, dada la escala fue la fachada principal de la UTN como lo confirma la señalización todavía existente. El tratamiento de las medianeras y fachada posterior toma en cuenta el alto grado de visibilidad que tiene el edificio desde la Avenida Alem.

Período 1974-2001

Se proyecta y habilita progresivamente un edificio de diez pisos con una superficie cubierta de 4159 m 2 para albergar aulas y gimnasio, proyecto del arquitecto Darío de Luca con cálculo de los Ingenieros Rivero y construido sobre línea municipal. Este edificio esta prácticamente completado hacia 1993.

De 1993 a el 2001, mediante crecimientos puntuales, se da satisfacción a las demandas de espacio producto de la evolución institucional llegando a construirse una superficie total cubierta de 7403 m 2 .